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En una compra similar a la que realizó con Motorola en 2011, Google adquiere talento de la taiwanesa HTC para el desarrollo de sus smartphones Pixel.

Google anunció la compra de parte de la taiwanesa HTC para adquirir talento para desarrollo de teléfonos inteligentes propios en una transacción por 1.1 mil millones de dólares.

Google no está comprando la totalidad de HTC, sólo una parte relativamente grande del negocio de teléfonos inteligentes de la empresa, el trato no incluye la división de visores de realidad virtual llamados Vive. Con esta adquisición Google se hace de la mitad del equipo de investigación y desarrollo de HTC, alrededor de 2 mil ingenieros, así como una licencia no exclusiva para aprovechar la propiedad intelectual de HTC, que le permite acceso a algunos de los avances de HTC en tecnología de teléfonos inteligentes.

Con dicha transacción, HTC recibe una inyección de efectivo, que le ayudará a sobrevivir en algunos mercados muy competitivos, y Google continúa con su apuesta para desarrollar su propio hardware, aseguró Rick Osterloh, vicepresidente senior de hardware de Google y bajo cuyo liderazgo quedará el talento adquirido a HTC.

Si bien Google es el creador del sistema operativo Android, que ahora se utiliza en más de 2 mil millones de dispositivos al mes, o el 89% de los dispositivos móviles en el planeta según cifras de la consultora IDC, sólo se ha dedicado a fabricar sus propios teléfonos inteligentes y tabletas. Rutinariamente se asoció con firmas como HTC, LG y Huawei para fabricar la serie de dispositivos Nexus.

Google compró a Motorola en 2011 por 12 mil 500 millones de dólares, y mientras lo manejaba como una compañía separada que vendía teléfonos inteligentes destinados a la gama baja, la adquisición se trató realmente de un movimiento de mercado para hacerse propietario del gran stock de patentes importantes que Motorola, la empresa creadora del teléfono móvil poseía.

Google vendió a Motorola a Lenovo en China en 2014 por 2 mil 900 millones de dólares ya sin la colección de patentes.

Con las patentes de Motorola y el acceso a ingenieros de punta por parte de HTC, Google se encuentra más cerca de cumplir su propósito de fabricar teléfonos "Made By Google" que puedan ofrecer versiones de Android no alteradas por los fabricantes y posicionar mejor al sistema operativo ante iOS de Apple.