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La conquista de Marte es una oportunidad para desarrollar productos y servicios útiles en la Tierra. Marte como negocio es la nueva visión de los emprendedores.

Puede sonar lejano, pero no lo es. Imagínate a Marte como negocio. Sí, el llamado planeta rojo puede ser a corto plazo una gran opción para que fundes o amplíes tu compañía. Tal vez sí tengas que esperar una década para hacerlo, aunque desde ahora hay oportunidades que puedes aprovechar.

Durante los últimos años, la NASA ha estado promoviendo su programa Journey to Mars, con el objetivo de aterrizar a los astronautas en Marte a partir de la década de 2030, y ha estado desarrollando sistemas de lanzamiento y tripulación dirigidos hacia el logro de esa meta. Elon Musk, fundador y CEO de Space X, es otro de los que busca llegar a este planeta en la misma década, o antes.

Musk propuso varias opciones para que las empresas se sumen a esta conquista, a través de que participen con recursos económicos, incluyendo la perspectiva de una enorme asociación público-privada. Éstas serían misiones privadas de Marte a finales de la próxima década.

No hay duda de que en algún momento en el futuro, cuando la humanidad ya esté establecida en Marte, habrá muchas oportunidades para que las empresas y los emprendedores obtengan beneficios económicos con diversos desarrollos. Pero también es improbable que, a corto plazo, cualquier compañía que intente montar misiones comerciales iniciales independientes en Marte obtenga beneficios, a menos que éstas sean financiadas al menos en parte, si no totalmente, por entidades gubernamentales.

Pero esto no debe desanimarte si estás viendo a futuro concretar un negocio donde te beneficies por la llegada del hombre a Marte. Hay muchas oportunidades comerciales a corto plazo relacionadas con las misiones, con importantes mercados potenciales para las tecnologías asociadas y las capacidades necesarias para crear una presencia humana sostenible en la superficie de Marte.

Estas incluyen innovaciones, por ejemplo, temas de soporte de vida, agricultura, protección contra radiaciones, energía, telecomunicaciones, utilización in situ de los recursos, filtración y muchas otras tecnologías y desarrollos necesarios.

Muchas de estas tecnologías no requerirían un gran nivel de inversión para su desarrollo, como puede ser de inicio los grandes elementos de misión como cohetes pesados, vehículos de tripulación, propulsión y hábitats. Con el estímulo adecuado, los emprendedores deberían de estar ya creando tecnologías innovadoras en temas como telecomunicaciones, internet en el espacio, alimentos, trajes especiales, entre muchos otros, que podrían hacerlos competitivos, los cuales inclusive podrían tener aplicación para mejorar la vida en la Tierra.

De momento, aunque falta más de una década para que el humano pueda llegar a Marte, hay un mercado significativo en diversos países que podrían utilizar estas innovaciones, lo cual podría servir como punto de exploración para mejorar los desarrollos.

Para estimular este proceso, la NASA y otros actores deberán establecer programas y procesos que aprovechen los puntos fuertes del sector privado, y se realicen asociaciones público-privadas, para, por ejemplo, crear programa de carga comercial.

Si los seres humanos llegan a Marte a través de un esfuerzo de un gobierno, un modelo comercial en alianza con empresarios, será una gran oportunidad para la mayoría de las compañías en el mundo. Estas no son sólo para el descubrimiento de una nueva tierra, sino también para que los innovadores, empresarios y otros creen productos nuevos o mejores que contribuyen a la sostenibilidad de los seres humanos en el planeta rojo, y que también benefician a las personas en la Tierra.